Conocer tu tipo de piel es fundamental para definir tu rutina del cuidado de tu piel. Además te permitirán comprar productos que te ayuden a tener una piel saludable.
Sin importar tu edad, existen cuatro tipos de piel que aplican para todas las personas. ¿Y sabes cuál es el tuyo?. A continuación te compartiremos los diferentes tipos de piel y sus principales características.
- Normal. Este tipo de piel puede tolerar casi cualquier tipo de productos y se adapta bien a rutinas de cuidado de la piel sencillas.
- Seca. Además de requerir mayor hidratación que otros tipos de piel, una de sus principales características es que puede tornarse roja en ciertas áreas en épocas de frío.
- Sensible. Sin lugar a dudas si tienes este tipo de piel deberás tener cuidado en la reacción que puedas tener con productos nuevos, observa si existen reacciones alérgicas, áreas rojizas o sarpullidos que indiquen que quizás debas cambiar de productos para tu rutina diaria.
- Grasosa. Con una apariencia brillosa o aceitosa, este tipo de piel es más propenso a producir acné, para lo cual es recomendable evitar productos aceitosos que tapen tus poros y generan más complicaciones en tu rostro.
Si no estás seguro de cuál es tu tipo de piel, puedes siempre consultar con un especialista para que te ayude a construir una rutina del cuidado de tu piel con productos que se ajusten a tus necesidades.